La incompetencia de los niños en algunas situaciones del juego (partido), es el reflejo en el espejo de nuestra incompetencia como entrenadores, para crear, diseñar, planificar y organizar entrenamientos durante la semana que favorezcan aprendizajes que le ayuden a los chicos a jugar para competir cada fin de semana.
La incompetencia más grande de un entrenador formativo, es entrenar durante la semana todo en la simplicidad y el fin de semana arrojar a sus pequeños y jóvenes futbolistas a la complejidad…. (acto de cobardía)
Debemos devolverle el juego a los niños, para que el juego nos devuelva futbolistas. Los niños de 5 hasta 8 años juegan para aprender, los niños de 9 hasta los 12 años de edad aprenden para jugar al fútbol.
FUENTE: Omar Hernández – Director Técnico Profesional de Fútbol